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Consejos prácticos para aprovechar el arroz al máximo

El secreto para un arroz suelto y perfecto

Antes de preparar el arroz es fundamental lavarlo con agua fría para eliminar todo el exceso de almidón, pues éste hace que los granos se adhieran entre sí, dando como resultado un arroz más pastoso.

Al reducir el almidón, el arroz queda más suelto y ligero. Así que este paso sencillo marcará la diferencia en la textura final, evitando que tu arroz quede pegajoso o apelmazado durante su cocción.

Cuando cocines arroz en cacerola, elige una con tapa y evita destaparla durante el proceso para que el vapor no se escape y afecte la cocción.

Mantener la cacerola tapada es clave porque permite que los granos absorban el agua de manera uniforme, logrando una cocción perfecta y una textura ideal.

Esto se debe a que el arroz se cocina con el calor y la humedad atrapados dentro de la olla. Si el vapor se libera, el proceso se interrumpe y los granos pueden quedar duros o desiguales.

Además, al perder vapor, el arroz puede necesitar más agua y terminar con una textura menos esponjosa.

Sin duda, uno de los aspectos más importantes al cocinar arroz es usar la cantidad adecuada de agua. La proporción más común es 1 taza de arroz por 2 tazas de agua, aunque esto podría variar según el tipo de arroz que vayas a cocinar y la textura que deseas lograr.

Por ejemplo, para el arroz de grano largo: 1 taza de arroz por 2 tazas de agua; integral: 1 taza de arroz por 3 tazas de agua, ya que requiere más tiempo de cocción. Para el arroz basmati o jazmín: 1 taza de arroz por 2.5 tazas de agua, para mantener su textura ligera.

La cantidad de agua también puede variar según la altitud atmosférica del lugar donde vives; la mayoría de nuestras recetas se consideran a nivel del mar, por lo que, si te encuentras por arriba de los 1000 m de altura, deberás contemplar una cantidad mayor de agua o líquido para cada tipo de arroz que vas a cocinar.

Para mayor detalle, consulta nuestra guía completa en esta liga clic: para ir al Tip

Lograr la textura ideal en el arroz requiere seguir algunos pasos clave. Desde el lavado hasta el reposo, cada etapa influye en el resultado final, asegurando que los granos queden sueltos, tiernos y llenos de sabor.

¡Sigue este paso a paso para tener un arroz perfecto!

  1. Lavado
    • Coloca el arroz en un recipiente con agua fría hasta cubrirlo; mueve en círculos y despacio.
    • Cuela y repite el proceso hasta eliminar el exceso de almidón.
    • Cubre con agua fría y deja reposar 5 min; cuela y escurre por 5 min más.
  2.  Cocción
    • En una olla, calienta un poco de aceite (20 ml por taza); agrega el arroz lavado y calienta.
    • Vierte el agua, sal y hierve a fuego medio-alto.
    • Reduce a fuego bajo, tapa y cocina por 18 a 20 min o hasta que el agua se haya absorbido por completo y el arroz esté tierno.
  3. Reposo
    • Retira la olla del fuego, deja reposar tapado por 10 min más, para que el arroz termine de cocinarse al vapor y adquiera una textura más suave y esponjosa.

Descubre la medida exacta de agua según el tipo de arroz que utilices y te quedará perfecto.

El arroz es un ingrediente básico en la cocina y saber cómo almacenarlo correctamente puede marcar la diferencia en su sabor y textura. Aquí te dejamos algunos consejos para que tu arroz cocido se mantenga fresco y delicioso por más tiempo:

  • Una vez que el arroz esté cocido, extiende el arroz en una bandeja para que se enfríe más rápido y déjalo a temperatura ambiente.
  • Pásalo a un recipiente con tapa hermética para protegerlo de la humedad y evitar que absorba olores de otros alimentos.
  • Guárdalo en el refrigerador hasta por 3 o 4 días.

Tendrás un arroz listo para usar cuando quieras.